La reciente publicación de la Estrategia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (National Security Strategy of the United States of America, November 2025) y su leit motiv central de “America First” a nadie ha dejado indiferente. Un resumen de su posición global es la siguiente imagen del texto:

  • En el Hemisferio Occidental (América, el Caribe y Groenlandia) se refuerza la histórica Doctrina Monroe , que data de 1823, ocho años después del término de las Guerras Napoleónicas que arrasaron el Viejo Continente y cuando las colonias americanas de España y Portugal estaban sucesivamente declarando su independencia. Resumidamente ésta plantea una “América para los americanos”, anticipándose a que potencias externas rivales – léase ahora China, antes las potencias europeas – fuesen a instalar fuerzas o desarrollar capacidades que pudiesen ser amenazantes, o ser dueñas o controlar estratégicamente activos vitales en este hemisferio. Canal de Panamá bajo control chino: ninguna posibilidad; Rusia o China en Groenlandia, descartado; puerto chino en el Cono Sur austral chileno o argentino, tampoco.
  • En Asia, liderando desde una posición económica y militar fuerte, Estado Unidos busca que sus aliados contribuyan a mantener el Indo Pacífico libre, abierto y económicamente vital, en oposición a una zona controlada por China. En lo más inmediato, Estados Unidos reitera su posición histórica que no apoya un cambio unilateral en el status quo de Taiwan y que va a sostener una capacidad militar suficiente para evitar y disuadir cualquier agresión en la “First Island Chain” que va desde las islas de Japón a las Filipinas, pasando por Taiwan, englobando los mares de Japón, del este de China y del sur de China.

  • En el Medio Oriente, dada la pérdida de dependencia mundial de sus hidrocarburos y la desarticulación gradual de las redes de inestabilidad de origen iraní, el foco estaría en su desarrollo. Hay que recordar que Estados Unidos pasó a ser un exportador neto de energía hace cinco años. El precio del barril de petróleo que actualmente ronda los US$ 60, equivalente a menos de 1/3 – en términos reales – del valor que tuvo en su peak previo a la crisis financiera de los años 2008 – 2009 o la mitad del peak reciente en el año 2022 detonado por la invasión rusa de Ucrania, y aún a pesar de la inestabilidad por acciones militares que ha habido este año en la zona, no hace más que confirmar que la transición energética en curso y la irrupción productiva de Estados Unidos han ciertamente debilitado estructuralmente al petróleo y demás energías fósiles – y por definición a sus oferentes – en su rol hasta ahora clave productivamente pero desestabilizante por su frágil equilibrio. En otras palabras, el valor económico del Medio Oriente petrolero y Rusia en su centralidad energética se han visto damnificados en su esencia – y sin vuelta atrás -. La Unión Soviética finalmente cayó con un precio que rondaba los US$ 40 el barril, en moneda actual… Probablemente Putin también se acuerda.

  • El caso de Europa, el más llamativo, es uno de un fuerte llamado de atención a su debilidad ya crónica de falta de crecimiento y dinamismo y de una patente desatención a sus capacidades defensivas. Resalta aquí, sin embargo, la ausencia de crítica del documento ante la invasión rusa a Ucrania y que en vez de abogar por un frente común frente a tal abuso, buscaría llegar y quizás forzar una “estabilidad estratégica” con el régimen de Putin que finalizaría con una partición de Ucrania. Si la razón de fondo fuese gestar un germen de división entre Rusia y su gran y decisivo soporte chino, probablemente esta política estaría pecando de ingenuidad y Ucrania seguiría parcialmente ocupada por su vecino invasor que, en estricto rigor, busca ocupar la totalidad de ésta.

Se entiende y es lamentable que Europa pase por un mal período – especialmente a partir de la crisis financiera de los años 2008 – 2009 en que su ingreso per cápita ha terminado representando un 52% de aquel de Estados Unidos – y que sea necesario hacerla reaccionar – porque claramente tiene los medios para hacerlo -; lo que no se entiende es su eventual abandono cuando ésta justamente necesita apoyo y hoy aparece peligrosamente indecisa ante un país también armado nuclearmente que representa tan sólo un décimo de su PIB y un tercio de su población, pero que sin embargo es decidido. Y esto último, visto está, no es poco.

¿Estabilidad estratégica? Rusia ha perdido aproximadamente 300.000 soldados en esta aventura expansiva que lleva casi cuatro años. Rusia va por el total de Ucrania… El abandono – o amenaza de abandono – de Europa y Ucrania por parte de Estados Unidos no va a ser gratis para ninguna de las partes. Aquí los Estados Unidos están apretando en demasía una tecla, soslayando la conducta del agresor y enviando una conflictiva señal al resto del mundo que la ley del más fuerte puede mover fronteras sin mayor sanción.

  • ¿Y Chile? A título anecdótico, el historiador Bernardino Bravo Lira escribió en el año 1993 “Diego Portales, ese terrible hombre de los hechos”. En uno de sus capítulos decía lo siguiente:

“Corre el año 1822. Brasil y México acaban de declarar su independencia. En Chile gobierna O´Higgins y en Perú San Martín ha conseguido ocupar Lima, preludio de la victoria de Ayacucho , dos años más tarde, que sellará la independencia de ese país y de Bolivia. Desde Lima el novel comerciante Portales comenta al pasar a su socio las últimas noticias: “parece que los Estados Unidos reconocen la independencia americana … El Presidente de la Federación de Norte América Mr. Monroe ha dicho se reconoce que la América es para éstos. ¡Cuidado con salir de una dominación para caer en otra! Hay que desconfiar de estos señores que muy bien aprueban la obra de nuestros campeones de la liberación sin habernos ayudado en nada: he aquí la causa de mi pregunta. ¿Por qué ese afán de Estados Unidos en acreditar ministros, delegados y en reconocer la independencia de América sin molestarse ellos en nada? ¡Vaya curioso sistema, mi amigo! Yo creo que todo esto obedece a un plan combinado de antemano y sería éste: hacer la conquista de América, no por las armas, sino por la influencia en toda esfera. Esto sucederá, tal vez hoy no, pero mañana sí. No conviene dejarse halagar por estos dulces que los niños suelen comer con gusto sin cuidarse del envenenamiento”.

“Sobran comentarios. Estas palabras, anteriores al enunciado de la llamada doctrina Monroe y de la del destino manifiesto dan la alerta frente al expansionismo de los Estados Unidos con un cuarto de siglo de anticipación a que esa potencia arrebatará a México la mitad de su territorio.”

200 años han pasado y la Doctrina Monroe sigue vigente, implícita o bien explícitamente tal como ahora se la recuerda. Han sido 200 años en que el país del norte fue exitoso y el resto nos quedamos atrás, por responsabilidad propia.

Para Chile, hoy, la Doctrina Monroe es un dato de la causa. Bajo ese paraguas, va y debe seguir comerciando con el mundo, China obviamente incluida, siendo el mayor socio comercial. Evitar caer en el juego de los dos grandes rivales mundiales debería ser prioridad, pero con un principio claro siempre: Chile es parte del mundo occidental por su historia, cultura e intereses de largo plazo y esa línea nunca se puede y va a transgredir. Nunca.

Capisci, China?

Manuel Cruzat Valdés

14 de diciembre de 2025